Andrea Roxana Mejía Pérez, se volvió aprendiz de la piscicultura, a través del proyecto de cultivo de tilapia roja de su centro escolar

El camino de aprendizaje inició con las enseñanzas teóricas, integradas por charlas y capacitaciones, que luego dieron paso a la formación práctica basada en el aprender haciendo.
La niña también se involucró junto a 19 alumnos en la compra y siembra de los alevines, además de conocer sobre los factores que favorecen o no a este tipo de cultivo.
“Participé también en las labores de aseo del estanque, alimentación de los peces, monitoreo de crecimiento y peso hasta que llegó el momento de la pesca y la preparación del delicioso pescado”, dijo la estudiante.
El proyecto en el que ha permanecido Andrea durante los últimos 10 meses estuvo estancado durante seis años por falta de recursos económicos.
La revitalización del exitoso proyecto se logró con el apoyo de UNICEF/KOIKA y Save the Children que aportaron el 60 por ciento de los recursos económicos para ejecutar la actual cosecha.
Aprendizaje para la vida
La laguna productiva en la que Andrea pudo experimentar la labor microempresarial, de biología, ingeniería y ecología, se encuentra cercana a sus salones de clases.
El conocimiento adquirido se alcanzó según la estudiante a través del proyecto Formando Emprendedores “Cultivo de Peces Tilapias”, mediante el cual han alcanzado la producción de más de 2 mil libras de pescado.
Parte de la producción se utiliza para la preparación de la merienda escolar y compra de insumos de bioseguridad para los estudiantes del centro educativo.
Lilian Reyes: “Sentí la capacitación como adaptada a mi vida”
Sus momentos de crisis y el aprendizaje sobre como abordarlos de manera apropiada fue lo que destacó Lilian Reynelda Reyes Hernández, docente de la Escuela Independencia, de San Miguelito, Intibucá, luego de recibir el taller en Primeros Auxilios Psicológicos.
La formación fue impartida a un grupo de docentes de los municipios de San Miguelito y Dolores, en el departamento de Intibucá, con apoyo de una psicóloga voluntaria bajo la coordinación de Save the Children con el apoyo financiero de UNICEF/KOIKA.
“Yo sentí que la capacitación había sido como adaptada a mi vida. Yo enfrenté un proceso de salud y también la muerte de mi mamá; momentos que me han dado un cambio muy fuerte en mi vida, pero que pude encontrar a través de la capacitación las herramientas para superarlos”, dijo Lilian.
También consideró que de la misma manera ahora puede apoyar a los alumnos y padres de familia de manera más adecuada y oportuna.
“A veces no sabemos que está pasando a su alrededor, pues hay estudiantes que están viviendo situaciones difíciles y lo mismo sus padres, pero contando ahora con el conocimiento vamos a poder abordarlos”.
De acuerdo con la maestra, a partir de ahora replicarán la formación durante las reuniones con los padres de familia.
“Este proceso de formación nos viene a fortalecer el aspecto personal de docentes, padres de familia y los alumnos. Me quedo agradecida y espero que sea constante”.
La jornada formativa se realizó en el marco del proyecto Fortalecimiento de Espacios Educativos Seguros y Amigables Reimaginando la Educación en Honduras, el cual fortalece las capacidades de docentes, madres, padres de familia, alumnas y alumnos.

Yessy Nataly: “Antes apoyaba a los jóvenes de manera empírica, pero ahora basado en conocimiento científico”.
Yessy Nataly Trejo Amaya, es una de las docentes del Centro de Educación Básica Francisco Morazán, de Yamaranguila, Intibucá. La educadora hasta hace unos días adoptaba un enfoque humano para cuidar y apoyar a los educandos que enfrentaban momentos de crisis, pero de manera empírica.
Pero todo cambió, hasta su actuar personal, con el taller en Primeros Auxilios Psicológicos que brindaron expertos de Save the Children con el apoyo de UNICEF/KOIKA.
“Aprender sobre el manejo adecuado de una persona que afronta una situación crítica, ha sido de mucha importancia para mí, en especial para atender a los estudiantes, en especial durante los últimos meses ya que con la llegada de la pandemia de la Covid-19 se pudo palpar un aumento de los problemas emocionales en especial con los niños y jóvenes”, dijo la maestra.
Y es que ayudar a las alumnas y alumnos a superar momentos de crisis ha sido parte de su desempeño, sin embargo, hasta en fecha reciente logró conocer sobre las herramientas adecuadas para restablecer el equilibrio emocional de una persona que enfrenta una situación difícil.
“Antes apoyaba a los jóvenes de manera empírica, pero ahora basado en conocimiento científico, mediante una serie de pasos, aconsejando al estudiante y abordando también al padre de familia”, agregó.
De acuerdo con la maestra para una buena intervención es importante prestar atención a la persona que enfrenta la crisis, escucharle de forma activa y con empatía, brindándole una ayuda práctica.
“Todas las personas en algún momento de nuestra vida hemos atravesado una crisis y pudimos reconocer que con ayuda de otras personas y de Dios se pueden atender cualquier problema”, expresó.
La dinámica con que se llevó a cabo el taller permitió a los participantes como Yessy a comprender conceptos sobre los tipos de crisis, signos y síntomas ante una crisis, y la importancia de los primeros auxilios psicológicos.
En la jornada en la que participó Yessy se involucraron más de 20 educadores en el marco del proyecto Fortalecimiento de Espacios Educativos Seguros y Amigables Reimaginando la Educación en Honduras.
